Atentado de Falsa Bandera

Entendemos por atentado de falsa bandera, a un atentado planificado y ejecutado por un mismo país, el cuál se ve perjudicado a sí mismo como consecuencia de éste, si bien su autoría se le adjudica a actuante externo.

Al parecer es una práctica política y militar utilizada desde hace tiempo, aunque el ‘ataque’ del 11-9 del 2001 a las torres gemelas (World Trade Center - Nueva York, EEUU) ha despertado el interés sobre el asunto al profundizar en la investigación y conocerse detalles del mismo.

Sobre el mismo, se hace referencia a explosivos ubicados en lugares estratégicos para obtener una demolición controlada (con el menor daño colateral), y personas que escucharon estas explosiones antes del impacto de los aviones. Irregularidades en cuánto a los supuestos terroristas árabes y a los pilotos que volaban los aviones. El interrogante sobre el tercer edificio que se desploma sin ninguna explicación. Una semana antes del incidente ya se había hecho el resguardo de toda la información financiera (¿se anticiparon?)….

http://kontrainfo.com/el-gran-engano-detras-del-11-s-115-mentiras-sobre-las-torres-gemelas/

¿Cuál es el objetivo perseguido mediante estos autoatentados? 

Estos eventos suelen implicar una importante inyección económica a una cartera del gobierno del país implicado, generalmente es en el área de Defensa, también como consecuencia se implementan grupos de leyes y medidas que favorecen sectores políticos y militares. Esto, de acuerdo a la magnitud del incidente.

Como consecuencia del ‘atentado’ a las torres gemelas, el presupuesto destinado para la seguridad en Estados Unidos desde el año 2002 y hasta el 2006 subió en US$ 50.000 millones en comparación con toda la década de 1990. El Gobierno de George W. Bush, presidente entre el 2002 y 2008, inició programas de seguridad preventiva y promovió invasiones a Afganistán e Irak. Tras los ataques la principal consecuencia fue el aumento en los controles a los derechos civiles. Se aprueba la ‘Ley Patriótica’ –firmada pocas semanas después de los ataques-, que, entre otras cosas, endureció los controles de seguridad en aeropuertos, los programas de inteligencia, el espionaje a ciudadanos y compañías (tanto dentro como fuera de EEUU) o el acceso a información privada relevante. Edward Snowden, un informático que trabajaba para una empresa contratada por la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU (NSA, en sus siglas en inglés) filtró a los medios una gran cantidad de información sensible, como el espionaje de EEUU fuera del país –incluidos mandatarios de todo el mundo- o la vigilancia masiva de las comunicaciones de los ciudadanos. EEUU ejecuta un programa en el que almacena todas las comunicaciones telefónicas de los ciudadanos y puede requerir su información personal a terceras partes (bancos, proveedores de tarjetas de crédito, compañías telefónicas, proveedores de Internet) sin una necesidad real de una orden judicial. Sus tácticas para ciudadanos no estadounidenses son todavía mucho más invasivas. Otra medida adoptada desde 11-9 es la reactivación de búnkers subterráneos.

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Otro atentado señalado como de falsa bandera ocurrió en Francia y fue contra el semanario satírico francés  Charlie Hebdo, en París, el 7 de enero de 2015, cuando dos hombres enmascarados (identificados como los hermanos Kouachi) y armados con fusiles de asalto y otras armas entraron en las oficinas de dicho semanario. Ellos dispararon hasta 50 tiros, matando a 12 personas e hiriendo a otros 11 y gritando «Al•lahu-àkbar» (‘Alá es [el] más grande’) durante el ataque. También mataron a un oficial de la Policía Nacional de Francia poco después. Los asaltantes supuestamente se identificaron como pertenecientes a Al-Qaeda en la Península arábiga (la rama de Al Qaeda en Yemen).

Han trascendido muchos interrogantes sobre este ‘atentado’ que no tienen explicación. Veamos: 

• El patrullero al que le disparan tiene 15 orificios de bala, mientras los terroristas sólo le dispararon 7 tiros. Además los agujeros no se corresponden con la de un AK-47, sino a los de un bajo calibre. Este patrullero sería una prueba plantada.
• El "fusilamiento" inexistente al policía tirado en el piso. Se dijo que había sido rematado cuando las imágenes muestran que no fue así.
• El Citroen C3 en el que se desplazan era negro y con retrovisores plateados, mientras que el Citroen C3 que encuentra la policía y donde identifican a los terroristas porque alli se olvidaron el DNI, tenía el espejo retrovisor negro.
• En un video se puede ver como uno de los terroristas saca un cargador con munición de fogoneo del chaleco antibalas que cambia por el de munición de guerra, que luego usa para simular un tiroteo. 
• Según testigos presenciales uno de los terroristas tenía ojos celestes mientras que esto no se verifica con ninguno de los dos señalados terroristas .

Se han señalado además de éstas, otras incongruencias. La mayoría de los videos que muestran estos detalles fueron retirados de Youtube. A continuación, el video que muestra el falso fusilamiento del policía:

https://www.mundiario.com/articulo/a-fondo/charlie-hebdo-diferencias-auto-terroristas-y-encontro-policia/20150114055804026091.html

Luego del ‘atentado’, entre las medidas adoptadas, destacaron la creación de 2.680 puestos en tres años en la lucha contra el terrorismo, y una inversión de 425 millones de euros en equipamiento. El Gobierno presentó una ley para regular las actuaciones de los servicios de inteligencia, en particular las escuchas telefónicas y el control de Internet y se aprobó que los servicios secretos franceses tuviesen amplios poderes para rastrear la Red e interceptar comunicaciones telefónicas y cibernéticas. Para ello les basta con autorizaciones del primer ministro, pero sin control judicial. François Hollande anunció en abril del 2015 el aumento del presupuesto de Defensa (31.400 millones de euros anuales). Tras los atentados, las Fuerzas Armadas fueron movilizadas en el exterior para luchar contra el terrorismo (9.000 soldados) y en la vigilancia de los lugares sensibles en territorio nacional, en el marco del plan antiterrorista Vigipirate. 

Como consecuencia de fondo, esta acción implantó el miedo en la población (de verse indefensos ante posibles acciones terroristas, ‘temor de incertidumbre’) e incrementó el rechazo hacia el inmigrante.